Febrero 19 de 1913
Honrado por el señor presidente de la república, don Francisco I. Madero con el cargo de secretario de Estado y del despacho de Relaciones Exteriores, procuré servir a mi patria poniendo el humilde contingente de mi lealtad y de mi honradez. Los acontecimientos a los que asistimos me han colocado en el caso de facilitar los medios para que dentro de la ley se resuelva una situación que de otro modo acabaría con la existencia nacional. He aceptado con toda conciencia ese papel, ya que de rehusarme hubiera cooperado a futuras desgracias. La historia resolverá serenamente sobre mi actitud; estimo demostrar con ella mi lealtad a quien me honró con su confianza y mi amor a mi patria. Estas consideraciones me hacen dimitir del puesto de presidente de la república que por ministerio de la ley he desempeñado por unos momentos, después de haber nombrado secretario de Estado y del Despacho de Gobernación al señor general V. Huerta. Ruego a ustedes, señores secretarios, se sirvan dar cuenta a la H. Cámara de Diputados con esta renuncia, para los efectos legales.
|